Honda actualiza a su modelo más importante, el Honda Civic, mediante un discreto facelift, la incorporación de más tecnología, y la adición de versiones HEV.
A dos años de haber salido al mercado, esta onceava generación del Honda Civic ha sido actualizada para mantenerse vigente tanto en su diseño como su equipamiento. Hay tres versiones disponibles: la de acceso a la gama, que es la i.Style (que mantiene el 2.0 litros de 150 caballos con caja CVT), a un precio de 580,900 pesos, y dos opciones híbridas que resultan muy interesantes.
Ambas usan un motor de combustión también 2.0 pero de ciclo Atkinson de 139 caballos, que trabaja en conjunto con uno eléctrico de 181. Los dos en conjunto ofrecen un total de 200 caballos y un torque de 232 lb-pie. La primera opción híbrida es la Sport que está en 684,900 pesos y la segunda es la Touring cuyo precio es de 724,900 pesos.
En la presentación del Honda Civic tuvimos oportunidad de manejar brevemente esta última Touring, que es la tope de gama, misma que nos dejó muy buenas impresiones no solo por su notable refrescada al diseño actual, también por su buen desempeño al ser un HEV, es decir, un Hybrid Electric Vehicle. Lo más notable de ésta es lo que acabamos de mencionar, que abandona el motor turbo y lo reemplaza por un 2.0 litros de aspiración natural que funciona bajo el ciclo Atkinson.
¿Qué es el ciclo Atkinson?
En esencia el ciclo Atkinson retrasa ligeramente el cierre de las válvulas de admisión, permitiendo que se reduzca el esfuerzo durante la carrera de compresión; si bien, esto es contra intuitivo, tiene la ventaja de que en el colector de admisión, la presión atmosférica aumenta permitiendo llenar mejor el resto de los cilindros.
Al final, la relación de compresión es más baja y por la misma razón se requiere menos esfuerzo del mismo motor para comprimir los gases. Si bien un motor Atkinson ofrece menos potencia que un motor de ciclo Otto (el ciclo normal de cuatro tiempos), en un vehículo híbrido esa diferencia es compensada por la asistencia de los motores eléctricos, de modo que el conjunto ofrece una mejor respuesta por la baja resistencia del motor de gasolina a aumentar de revoluciones.
Impresiones de manejo del Honda Civic HEV
Esta combinación de motores resulta en una respuesta muy rápida, demostrando lo bien que funciona el sistema híbrido. La transmisión continúa siendo una CVT, pero ya muy mejorada en sensaciones y sobre todo ya se perciba mucho más natural, a diferencia de las primeras versiones de este tipo de transmisiones continuamente variables.
El Honda Civic HEV incorpora también varios modos de manejo, incluido el modo “deporte” (¿por qué se decidió traducir esto?, creo que nunca lo sabremos). El manejo es muy bueno, Honda no decepciona en ese aspecto, en especial la sensación al volante y la respuesta al acelerador que resulta francamente sorprendente (pronto lo probaremos a la altura de la ciudad de México, que cambia las cosas un poquito).
Por dentro del Honda Civic HEV
Hay buen espacio interior en el Honda Civic HEV tanto en la fila delantera como en la posterior, se ha incrementado la habitabilidad de manera notable, así como el tamaño de la cajuela, cosa que siempre se agradece en un sedán, de los cuales somos muy fans; al menos yo.
A los lados del volante se encuentran unas paletas como las usadas en las transmisiones semi automáticas o automáticas con modo manual, pero en este caso funcionan para aumentar o disminuir la regeneración a la hora de soltar el acelerador, produciendo una sensación parecida al frenado con motor.
Vale la pena destacar que la recarga de la batería al soltar el acelerador o frenar ligeramente, es más que adecuada, de modo que el motor Atkinson siempre tendrá ese respaldo eléctrico que se siente tan bien al acelerar. Si el futuro va por acá, no tenemos ningún inconveniente.
Equipamiento del Honda Civic
Los sistemas de seguridad activa y pasiva han sido incrementados en todas las versiones del Honda Civic y tiene el asistente de cambio de carril accidental más eficiente y discreto que me ha tocado ver, ya que si detecta una desviación, mueve el volante para recuperar el carril correctamente.
Cuenta con las asistencias acostumbradas, como frenos antibloqueo y detector de punto ciego, así como sistema de mitigación de accidentes, el cual primero da aviso de que no se está desacelerando acorde al tránsito y en caso necesario aplica los frenos. También incluye detección de personas y control de velocidad de crucero adaptativo por medio de radar.
Las versiones híbridas del Honda Civic cuentan con quemacocos y climatización automática de doble zona. La versión Touring HEV incorpora vestiduras en piel y tiene además un sistema de audio Bose con 12 bocinas. Para todas las versiones se incluye una pantalla táctil de 9 pulgadas para el sistema de info-entretenimiento con interfaz compatible con teléfonos inteligentes, con Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos.
En cuanto a seguridad pasiva, el Honda Civic incorpora ocho bolsas de aire y un diseño de compatibilidad avanzada en las mismas que protegen la cabeza de los ocupantes de mejor manera, en caso de un accidente en el cual se desplieguen dichas bolsas de aire.
Tuve la oportunidad de probar la primera versión del Honda Civic híbrido a mediados de la década de los 2000; de hecho, fue el primer automóvil híbrido vendido en México y en su momento causó mucho revuelo. Tanto como me impresionó esa primera versión en aquel entonces, me impresiona lo bien logrado que está este nuevo Honda Civic HEV; si la conducción del futuro va por ahí, estoy de acuerdo: un coche híbrido avanzado, no tiene que verse o sentirse como un electrodoméstico.
